domingo, 31 de enero de 2010

La mierda que los parió

El otro día, cuando venía de llevar a Noa a la escuela, vi a una señora paseando su perrito por el parque.
La mujer era muy elegante, de estas señoras peinadas siempre de peluquería que jamás salen a la calle sin maquillaje y perfume. El perrín, haciendo juego con la coquetería de la señora, iba muy bien peinadito, enfundado en esas chaquetas caniles que tan de moda estan.
De repente la señora frena su paso, mira hacia el horizonte como si una leve brisa besara su cara...mientras, a pie de la señal de "prohibido perros sueltos", el can tan mono y fashion también miró hacia el horizonte y... cagó. Así de claro. Cagó.
Esperé unos segundos en vano suponiendo que la dama haría lo debido ante tal situación. Y nada. La brisa de aire que acariciaba el rostro de la señora desapareció, el perro sacudió su culo y ambos siguieron su camino sin siquiera hacer algún falso ademán de sacar una bolsa para enfundar la mierdina tan fashion y tirarla a la papelera como Dios manda.
Esta señora y su actitud es muy de estos lares... Como si mirar hacia otro lado hiciera por arte de magia desaparecer la mierda del perro.
Yo me pregunto, este tipo de gente, que pasa de limpiar lo que sus perros por ser animales no limpian, nunca pisó mierda??? ¿Nunca experimentaron la asquerosidad de oler una fragancia tan repugnante a propio pie? ¿Será que esto de pasear perros y dejarlos cagar en cualquier sitio es una venganza hacia aquella mierda de perro pisada antaño?.
Que tristeza la desvergüenza. Y es que encima te lanzan la mirada desafiante de quien se siente "pillado" como diciendo... y a ti que te importa donde caga mi perro???.
Pues si señora, si señor, me importa y mucho. Primero porque da asco ver tanta mierda perril en las aceras donde yo camino. Segundo, porque , entre otros espacios públicos, usan los alrededores de los parques infantiles como servicios para perritos. Y tercero, porque cívicamente eso no se debe de hacer, por sentido común claro.
Pero así tal como el sentido común, el respeto y los buenos modales están a la baja, los designios de Dios tampoco mandan últimamente... No sé, se me ocurre que tendrá que ser nuestro ayuntamiento el que tome medidas al respecto, a no ser que, tal como la señora del perrito coqueto, creen que mirando hacia otro lado solucionarán el problema.
Yo confío en que mi sueño de una Laviana libre de mierda de perros, por fin, se cumpla. Así sea.

sábado, 23 de enero de 2010

I LOVE Martín Varsavsky

Si pudiera comprar una camiseta que diga I LOVE MARTIN VARSAVSKY, tal como rezan las que dicen I love New York, pues me compraría una de cada color y de cada talla, por si llego a engordar más. Además de comprarlas, ME LAS PONDRÍA a diario.
Vayamos al lío... Se preguntarán quien es el susodicho en cuestión... Pues es un señor de unos 40 y pico (mas cincuentón que cuarentón), quien a los 18 años, creo recordar, tuvo que salir pitando leches de Argentina huyendo junto a toda su familia de la dictadura.
Este muchacho creyó en si mismo y se lanzó a crear empresas que a muchos le sonarám tales como educ.ar, jazztel, ya.com, y fon entre otras. Vamos, que se forro, se hizo millonario y para sorpresa de muchos, sigue siendo digamos "humilde". Si si, de los que por ahi te los podes encontrar andando en bici por el monte, o tomándose un cafecito por cualquier chiringo de mala muerte.
Pues bien, por qué Martín se ha convertido en persona non grata en Buenos Aires??? Pues porque se le ocurrió escribir un artículo PERSONAL en su blog con el titulo de Por qué no voy a Buenos Aires. Este artículo se publico en Infobae sin su consentimiento, fue sacado del absoluto contexto en el que se escribió y los argentinos le hicieron llover insultos como respuesta. De hecho, el responsable de la Aduana Argentina le hizo pedir disculpas publicamente por tratarlos de chorros (o de que miran muchas veces pa otro lado).
Entre los absurdos argumentos para basurearlo estan adjetivos tales como los de traidor, boludo, pedazo de pelotudo... y dos comentarios que me llaman la atención: uno decía algo asi como que Argentina no es un país inseguro, que él alguna vez tuvo que salir corriendo porque lo quisieron robar, pero que nunca le pasó nada... Otro más simpático dice "No venis a la argentina porque ya no la necesitas, pero bien cuando te mataba el hambre la querias..No vengas nunca mas, traidor"
La gente escribe sin pensar. Martín Varsavsky no se ha metido con ninguno de los que le han escrito los 367 comentarios del artículo. Y acá es cuando resalto el título del blog del alcalde de Laviana (municipio donde vivo en España)"El poder de la palabra". Que razón tenías Adrián al ponerle ese título a tu blog...
A Martín me gustaría decirle que me da vergüenza ajena lo grasas que pueden llegar a ser algunos individuos. Grasas y maleducados. Viven en un país donde todo se tapa con el fútbol gratis, con un gobierno altanero y que a puño de decreto hacen lo que quieren. Un país donde claro, muchos dicen que no existe la inseguridad... pero te matan por un par de zapatillas usadas... donde las villas crecen (las chavolas, para que todos nos entendamos) a pasos agigantados, y donde lo importante es embrutecer a la población para que no piensen, para idiotizarlos, para sumirlos en un poder asboluto y una dictadura encubierta (vamos, solo en Argentina la mujer sucede al marido en la presidencia, ver para creer...)
Argentina se merece al millonario que ahora vanaglorian muchos: Ricardo Fort, el heredero de los chocolates, tan grasa, ordinario, patético e ignorante que da pena de solo leerlo en algún artículo periodístico. Ese es el millonario que se merecen, lamentablemente, claro.
Yo tampoco vuelvo más a Buenos Aires. No solo por los costos de los billetes, sino porque acá me acostumbre a vivir en libertad, sin miedo, sin ataduras...
Por todo esto... I Love Martín Varsavsky. Ahora verán que lío cuando lo publiquen en Infobae... Desde ya, yo no les doy permiso...

lunes, 18 de enero de 2010

No soy ni rubia ni tonta

Cuando era pequeña me gustaba escribir cuentos infantiles... Luego ya en mi adolescencia escribía un diario íntimo (se que suena a toallitas femeninas pero juro que así se llamaba) que venía con un candando absurdo porque cualquiera con una horquilla lo abría... pero vaya ilusión me hacía escribir mis muchas desventuras amoriles, porque era de la única forma en que que podía expresar mis primeras desilusiones...
Luego pasamos a las cartas de amor... vamos, si las apretujabas escurrían lágrimas de sangre... los puñales iban derecho al corazón y sin anestesia... Mi recurso escribir cartas de amor que jamás envíe para que no se burlaran de mis sentimientos con una prueba de perito caligrafo...
Más tarde, me aggiorne a la tecnología: los mails. El mejor invento para no gastar tinta y mandar a la mierda en segundos al imbécil de turno que me rompía el corazón.
Y que pasó con tanta escritura??? Pues un día tonto lo tiene cualquiera y así, apareció Salva en mi vida y yo en la suya.
De repente, los mails express se transformaron en testamentos de cariño. A la vieja usanza, recuperamos la escritura en papel donde nuestro corazón plasmaba las cartas de amor mas bonitas que uno pueda escribir y recibir...
Ese amor tan puro, mutuo y verdadero (que muchos suponían como mentira o una extrema desesperación de sentirnos queridos y no morir en el intento) tenía un solo camino a seguir posible y era que yo viniera a Asturias.
Pues nada, aca estamos. Con una familia puesta y compuesta y felices, muy felices.
Y ¿por qué este blog? Porque tengo ganas. Tengo ganas de poder escribir lo que pienso y siento desde este lugar en el mundo con todos aquellos que quieran leerme. Para reir, para llorar, para embroncarse o para estar de acuerdo, me da igual.
Pero me gustaría que me leyeran, sin editores de por medio que digan "esto no es comercial querida..."
Tan solo quiero demostrar y demostrarme que a mis pasados 40 años, que a pesar de que la tecnología ya se me empieza a resistir y por más ama de casa que sea (y que adoro ser)lo que no tengo es NI UN PELO DE TONTA.